sábado, 5 de abril de 2008

Mis cinco películas favoritas de Zombis


Hace unos meses hablé sobre la conversión en el imaginario popular sobre los zombis, gracias a la reinterpretación hecha de estos seres por George Romero. En una respuesta sobre aquel artículo prometí que iba a volver sobre el tema, esta vez para hablar de mis películas favoritas de zombis, que son mis monstruos favoritos en el cine de terror. Sin preámbulos aquí va mi lista en orden de preferencia:





1) El amanecer de los muertos (1978) de George A. Romero

Es, a mi parecer, la obra maestra de este subgénero pletórico de sangre y vísceras. Pero el deleite que nos proporciona las mutilaciones o la antropofagia no es gratuito, como muchos detractores del gore sostienen y cuyas objeciones pueden alcanzar a esta película de terror. La fruición de ver cuerpos cercenados en El amanecer de los muertos responde a una visión catastrofista de la realidad, un anatema feroz contra el orden establecido. Romero, el gran artífice de este subgénero, cuestiona despiadadamente el consumismo que lleva al hombre a ser solo un cuerpo con un cerebro atrofiado o casi inerte que piensa solo en comprar… de alguna forma no tan lejana a los zombis que solo piensan en comer hombres.

El filósofo francés Gilles Lipovetsky sostiene que: La sociedad hipermoderna está centrada en el presente, el tiempo libre, el consumo. Todo eso está reflejado en esta película, donde la supervivencia de los personajes que se encierran en un supermercado para sobrevivir al asedio de los zombis se convierte en una actividad placentera debido a los objetos que los rodean, desde muebles confortables hasta juguetes, sin tomar en cuenta el futuro (que es incierto). La destrucción de este grupo llega por el apego que llega a sentir uno de los personajes por esta vida de lujos a pesar de que la muerte lo rodea. El consumismo y el lujo anestesian a los hombres y los vuelve poco menos que zombis. Pero aquí no hay peroratas ni discursos explicativos, todo se desprende de un argumento inteligentemente estructurado y una puesta en escena eficaz, sin la parafernalia visual que distrae al espectador, como sucede con la mayoría de las producciones hollywoodenses de hoy.

Esta película, como toda obra maestra, se presta a múltiples interpretaciones. Yo apenas he tocado la punta del iceberg.






2) Caminé con un zombi (1943) de Jacques Tourneur

Antes de Romero, los zombis en el cine eran similares a su fuente de inspiración: las leyendas haitianas y africanas que hablaban de muertos que resucitaban para estar a las órdenes de su amo, quien generalmente era la persona que efectuaba la resurrección. Es decir, estas películas de terror apelaban al pensamiento mágico-religioso (las de Romero y las películas que siguieron apostaban por un pensamiento racionalista), el más arcaico pero que aún sigue teniendo vigencia.

De todas estas películas, la mejor es, de lejos, Caminé con un zombi, quizá la más poética que se haya hecho sobre este subgénero. Una enfermera (la mítica Frances Dee) viaja al caribe para atender a la esposa de un magnate que está afectada, aparentemente, por la locura. Sin embargo, poco a poco descubre que la señora está presa por un conjuro irreversible: ella es la zombi del título. El relato que aparentemente es convencional, esconde el miedo al deseo sexual, al pecado, la lujuria. La puesta en escena es la que la hace explícita con una jungla obscena y un esclavo zombi que tiene una evidente forma fálica. Es también una historia de aprendizaje para la enfermera, que más allá de experimentar el terror descubre su naturaleza sexual y los castigos que conlleva reprimirlos y trasgredirlos. Hermosa película a pesar de su contenido que, dicho sea de paso, haría las delicias de cualquier psicoanalista.





3) La noche de los Muertos Vivientes (1968) de George A. Romero

Esta película representa el segundo nacimiento de los zombis en el cine. Si otros monstruos como la criatura creada por Frankenstain o El Hombre Lobo entraban en decadencia, Romero revitaliza el género de los zombis modernizándolos: siguiendo la frase de Goya -los sueños de la razón produce monstruos- Romero crea zombis que nacen producto de la tecnología.



Algunos sostienen que el origen de los zombis de Romero es incierto, pero no olvidemos que una escena de la película afirma que la posible aparición de los muertos vivientes se deba a una radiación producida por un satélite que era enviado al espacio. La carrera espacial, tan en boga esos días, lleva a la destrucción de la sociedad que por cierto anida en su interior las disputas que provoca su aniquilamiento. Mientras los zombis, con su parsimonia atacan efectivamente en conjunto, el grupo de hombres que se protegen en una casa caen en disputas y discordias que los ponen en desventaja ante los primitivos pero unidos zombis. Somos capaces de ir al espacio pero somos incapaces de solucionar problemas como la convivencia, esa es una de las críticas de la película.



Y nada mejor que colocar como personaje principal a un negro, quien lidera el grupo de personas parapetadas y que muere no víctima de las mordidas de los antropófagos zombis, sino de una columna de atacantes humanos que se asemeja al KKK. Nuestra tecnología ha progresado de forma más veloz que nuestras relaciones sociales.





4) Braindead (1992) de Peter Jackson

El neozelandés Jackson será recordado por la trilogía de El Señor de los Anillos, una saga satisfactoria, pero que no se compara a está desfachatada, hilarante e ingeniosa película, quizá la más pletórica en mutilaciones y sangre que se haya hecho en el género.

Este filme de zombis es una excusa para retratar el complejo de Edipo, o mejor, la madre cocodrilo del que nos hablaba Lacan. Pero por favor, por la afirmación anterior no busque ni un poco de solemnidad en este filme. Un retraído joven que creció con una madre posesiva y un padre ausente se enfrenta a una epidemia de zombis producto de un curioso mono rata que infecta primero a esa señora brutal que es su madre. Pero la sujeción a la madre es tal que el joven Lionel se resiste a ser libre y la cuida a pesar del estado en que ella se encuentra y del amor de Paquita, una joven española que la liberaría de todos sus complejos.

El vecindario no tarda en infectarse y Lionel tiene que mantener en secreto la epidemia. Esta situación produce momentos realmente jocosos, de un humor negrísimo a veces, otras apela a un humor primario y morboso, pero igualmente efectivo, donde las risas son causadas por el ataque a un bebé zombi o simplemente el cercenamiento de un miembro. Los personajes de esta película son caricaturas y el enfoque que se le da la filme no traiciona esta propuesta. Pero eso no significa que sea carente de significados profundos: más allá de la representación de conceptos psicoanalíticos hay una historia oculta (que no vamos a revelar para no estropear el significado del filme) que recorre la película y que se abre dando lugar a que Lionel pase de ser un personaje torpe (un poco a la manera de Buster Keaton) a un personaje aciago y triste, lo que vuelve su ansias de liberación en un acto de catártico. La secuencia final es de antología: pocas veces he visto en el cine una representación tan audaz e inteligente del concepto lacaniano que antes expuse.

Esta película es ineludible para cualquier amante del cine, pero están advertidos: no es apto para las personas sensibles a la sangre y al humor gore.





5) El día de los muertos (1985) de George A. Romero

No solo Romero es el padre de los nuevos zombis, también es el máximo artista de este subgénero. Esta película recibió una fría acogida por la crítica, y si bien es la inferior de hasta su entonces trilogía de zombis, no deja de ser una película muy estimulante. Esta vez el filme no tiene las mismas connotaciones que sus predecesoras, pero eso no significa que sea posible encontrar más de lo que vemos.

Antes fue el racismo, luego el consumismo, ahora esta película se centra entre los conflictos entre la ciencia y el militarismo. Y aunque muchos pueden ver una crítica despiadada al mundo militar, esa mirada inquisidora de su autor también incluye a la ciencia. Son dos paradigmas distintos que necesitan convivir por el asedio de los zombis, pero, debido a diferencias irreconciliables y absurdas, esta convivencia está destinada a fracasar.

En esta película las escenas antológicas se centran en la enseñanza y análisis de un zombi, que supera sus limitaciones para empezar a dominar sus instintos primitivos para sofisticarse poco a poco. En las películas de Romero hay una evolución en el zombi, que pasa de ser meros autómatas en busca de carne humana a seres con inteligencia básica para poder organizarse, como vemos en la fallida Tierra de los Muertos (2005). Este zombi amaestrado tiene algo de niño en su comportamiento, figura que no deja de ser bastante grotesca y conmovedora a la vez. Esta película es otro triunfo de su creador que pasará a la posteridad como un autor de culto.

Otras películas

Algunos me reprocharán que haya incluido varias películas de Romero en mi lista, pero son las que más me gustan. Otras que podría recomendar son Shaun of the Dead, que es una comedia recomendable, aunque no tiene el desenfado ni la calidad de Braindead. Las películas del italiano Lucio Fulci no me gustan mucho, sobre todo Zombie 3 que me parece un mamarracho total. La única que se deja ver es Zombie (1979), aunque me parece un poco sobrevalorada. No he visto las películas asiáticas Bio Zombi (1998) y Junk (2000), pero tienen buenas referencias. Y aunque no se trate estrictamente de zombis, son interesantes las dos películas de Exterminio (en su idioma original, 28 Days Later y 28 weeks later), aunque más por lo que proponen que por los resultados. En todo caso la segunda parte me parece más lograda que la primera y tiene un magnífico inicio.

Todavía no he visto Diary of the dead, la última de Romero que retoma a sus zombis y que, al parecer, tendrá una secuela dirigida por él mismo. Solo espero que llegue pronto a mi país para poder verla.

Caeiro


Nota: Es tanto mi entusiasmo por los zombis que estoy en arreglos para que se publiquen en este blogs unos relatos inéditos sobre zombis. Cuando se llegue a un acuerdo se informará debidamente.

4 comentarios:

Bardamu dijo...

¿Has visto Rec, de Jaume Balagueró?

Caeiro dijo...

No, sé qué película es, pero no la he visto. Aunque Balagueró no es un director que me entusiasme, todo parece indicar que su última película es notable. ¿Qué tal es?

Espero que llegue pronto a mi país, si es que llega.

Caeiro

Bardamu dijo...

A mí me gustó, y coincido bastante con la lista que has propuesto. Lo mejor es verla sin saber nada. Puede que no aporte nada nuevo al género, pero salimos todos del cine con una angustia que no había experimentado en mucho, mucho tiempo.

Arthur dijo...

No se porqué pero de las que he visto sobre el tema, la única que me ha quedado grabada más que como película de zombies, como película sublime, ha sido 28 weeks later.

Es que juega con las emociones humanas más importantes, es tremenda, y me dejó en estado de 'desconexión del mundo' de regreso a casa tras salir del cine.